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22 de noviembre de 2011

MOON:
Desgraciadamente el género de la ciencia ficción en el cine actual está viviendo sus horas más bajas sin embargo, "Moon", sin ser nada del otro mundo (y nunca mejor dicho), ha subido la nota media de éste genero caído como decía al principio en desgracia en los últimos tiempos. Pero a pesar de todo, dicha nota en mi modesta opinión sigue en suspenso.

Pareció que con la aparición de "Solaris" o "Pandorum", el género se iba a relanzar pero no ha sido así y habrá que seguir esperando que alguien con medios, ganas, y sobre todo mucha materia gris vuelva a poner a la ciencia ficción en el lugar que se merece.

Por todo ello "Moon" ha sido un soplo de aire fresco en el enrarecido ambiente que rodea al género. Aunque es justo hacer notar que a pesar de su similitud con otrora auténticas obras maestras del género como "Alien" o "Atmósfera Cero" por poner dos ejemplos más o menos recientes, e incluso un icono como "Blade Runner" dista mucho de llegar al nivel de éstas (para mi de sobresalientes e incluso alguna de ellas de matrícula de honor).
 NO SE LO DIGAS A NADIE:

Por fin a alguien se le ocurre adaptar a Harlan Coben, aunque al americano autor le hayan descubierto antes en Francia que en el país que le vio nacer. Creador de un puñado de novelas policíacas muy apreciables y monarca absoluto de los giros "de guión", el escritor era material de primera para el cine y la primera adaptación que conozco sale con un saldo más que positivo.

La película de Canet es una muy correcta traslación de la novela de Coben a la pantalla y además ofrece un thriller bien hecho y coherente que tira más de una trama pergeñada con inteligencia que en el truco o el golpe de efecto, ofreciendo lo que es algo muy raro en los thrillers actuales: clase.

Otro punto a favor es el hecho de que todo lo que sucede en la película, todos los personajes y acontecimientos forman parte de la trama principal, no sobra nada, ni hay escenas de relleno, son dos horas que se pasan volando gracias a esta economía narrativa que no permite que se cuele nada que pueda desengancharnos de lo que se nos cuenta.